2012 - Farmacia profesional, sus perspectivas como Unidad Económica en el contexto actual

La farmacia es un centro asistencial y de salud. Sus responsables son los únicos capacitados para dispensar medicamentos, aún los de Venta Libre.

La forma de percibir honorarios por la prestación del servicio farmacéutico para los titulares de las oficinas de farmacias es la rentabilidad que se obtiene de la venta de los productos éticos, de venta libre y del bienestar.

Por lo tanto, debemos tener en cuenta que se trata de una Unidad Económica, y por lo tanto su gestión y control requiere de ciertos conceptos indispensables para realizarla con éxito.

Es un tema complejo para el farmacéutico profesional la gestión de la Oficina de farmacia como Unidad Económica, ya que no fue formado para ello, y en la mayoría de los casos les resulta poco atractivo el manejo de” números”

Distintos factores componen ese concepto de “Rentabilidad” y podríamos clasificarlos en Externos e Internos.

Los Factores Externos son aquellos que no son controlables por el titular de la Oficina, como ser: precios de ventas, sueldos del personal, inflación, alquileres, bonificaciones a la Seguridad Social, impuestos, etc.

En tanto los Factores Internos son los que dependen de la gestión del titular, como ser, Compras, Ventas, Cobranzas, Stocks, acciones sobre el local.

Los métodos de dispensación y cobranzas de las prepagas y Obras Sociales requieren de un estricto control, ya que las diferentes metodologías de pago generan circuitos financieros complejos y de difícil seguimiento.

Este es el mejor ejemplo de conjunción donde los factores internos y externos requieren de una excelente acción de Gestión y Control para asegurar el mejor rendimiento de esos contratos.

Considerando que no existe posibilidad de ejercer influencias de cambio sobre los factores externos, es indispensable pensar en el desarrollo de una gestión eficiente en los Factores Internos y las consecuencias de los Factores Externos.

Trataremos de señalar algunos conceptos de la situación en la que se desenvuelve la Farmacia Profesional como Unidad Económica y cuáles son las alternativas para optimizar el manejo de los factores y poder incrementar la rentabilidad.

El Mercado mantiene la característica de evolución que viene sosteniendo desde la recuperación de la crisis de 2002, pero con una desaceleración significativa en cuanto al nivel de crecimiento en este año.

Por supuesto, es un dato todavía positivo, que indica que la variación de volumen aún continúa siendo favorable.

Los incrementos de los precios de venta de los productos no acompañan el crecimiento global de los índices de inflación y contribuyen a disminuir la rentabilidad.

Estos precios y el bajo incremento de volumen generan niveles de facturación con un menor flujo de fondos en la cadena comercial.

Para la farmacia profesional, se refleja directamente en sus ingresos de dinero ya que el movimiento real de caja disminuye permanentemente.

Toda la economía de la farmacia profesional está sustentada en un el nivel de ventas de los productos farmacéuticos, lo que propone que ante una alternativa de disminución del mismo haya que actuar rápidamente para encontrar otras vías de rentabilidad adicional.

El eje central en el cual debe estar enfocada la actividad de la farmacia considerada como Unidad Económica es:

LA GESTIÓN ENFOCADA A LA RENTABILIDAD , CON ESPECIAL ATENCIÓN EN EL EFECTO INFLACIÓN y EL VOLUMEN DE VENTAS

Los incrementos de costos internos requieren de un mayor flujo de recursos para su atención.

Por lo tanto, es necesario actuar en consecuencia para recuperar el nivel de facturación, producto de la desaceleración del volumen...

En épocas de inflación debemos estar muy atentos a la Ecuación Financiera de la Farmacia.

Es necesario conocer la evolución de los distintos indicadores en forma rápida y segura, de manera tal que nos permita actuar y tomar decisiones.

Se debe mantener el stock con unidades de venta rápida y segura, tratar de analizar las Cuentas a Cobrar con su rotación y antigüedad.

Es muy importante monitorear los productos y su rentabilidad, ya que es la base para mantener el ingreso neto para hacer frente al resto de los egresos. El concepto de rentabilidad absoluta debe estar presente en cada análisis de venta.

Es razonable mantener un importe normal de deuda comercial, es decir aquella que está en relación directa con las compras y las ventas, relativa a ventas de productos de alta rotación, cuidando no endeudarse con ofertas de productos de escasa salida.

Es absolutamente no recomendable el endeudamiento financiero, ya que en estas épocas las tasas de interés tiene incorporadas en forma implícita la tasa de inflación prevista, y un porcentaje de cobertura adicional por riesgo.

Una recomendación especial para esta época.

Es imposible manejar una Farmacia Profesional, considerándola además como Unidad Económica, sin información, que brinde material para la toma de decisiones adecuadas en estos momentos turbulentos.  

Una reflexión final:
Los resultados de Oficina de Farmacia Profesional, si bien son una consecuencia directa del entorno macro, siempre dependen de de nuestra actitud con el paciente-cliente, calidad de atención y servicio profesional y del control que hagamos de las variables internas y externas que conforman a la Farmacia profesional como una Unidad Económica.


EDUARDO TCHOUHADJIAN
Contador Público